Vivimos tiempos convulsos en los que cada semana desayunamos con noticias sobre nuestro sector que hacen que se nos pongan los pelos de punta. Desde las propuestas de regulaciones municipales de los precios del alquiler, pasando por las intervenciones surrealistas de la CNMC a portales, marcas y softwares de gestión inmobiliaria, a la supuesta subida de los impuestos derivados de la compraventa de inmuebles, y reportajes completos sobre los “fondos buitres”, parece que nuestro sector, una profesión no regulada, está en el ojo del huracán.
Es un momento de normalidad en la oferta y demanda de compraventas en nuestro país, el medio millón parece una cifra estable y lógica para los próximos dos o tres años. El problema radicaba hace unos meses en los players del sector, ¿hay espacio y negocio para un número tan alto de agentes y agencias inmobiliarias? ¿Todos tienen y siguen un código ético de actuación en favor del consumidor? Por esa razón desde Comprarcasa seguimos apoyando todas las iniciativas de regulación del sector que exijan una formación mínima, unos seguros de responsabilidad civil y un código ético para todos, que nos dé el prestigio que nos merecemos como pasa en muchos países avanzados.