En 2011, Google decidió cerrar una funcionalidad que permitía publicar una ficha con información de una vivienda en venta o alquiler en Google Maps. Era Google Real Estate, como se la acabaría denominando. Me consta que algunos inmobiliarios, y yo mismo con un inmueble de mi propiedad, experimentamos con esa funcionalidad, que prometía cambiar las reglas del negocio inmobiliario en detrimento de los portales y su férreo oligopolio de la información de propiedades en venta y en alquiler.
Como acostumbra a hacer, Google no dio ninguna explicación de por qué había dado carpetazo a su proyecto de portal inmobiliario. En España el cierre tuvo nula repercusión, principalmente porque Google Real Estate no estuvo nunca disponible en España. De hecho, nunca fue más allá del inglés y de los países anglosajones, lo que da fe del escaso apoyo que recibió finalmente el proyecto. Solo podemos especular con la idea de que no le compensaría económicamente perder la publicidad de los portales inmobiliarios, que al fin y al cabo se han convertido en uno de los grandes inversores en Google Ads.
Para continuar leyendo este artículo, accede a tu cuenta o regístrate:
Más del autor
