Agentes inmobiliarios de todo Estados Unidos se reunieron en Atlanta del 8 al 11 febrero para compartir recursos, conocimientos y generar nuevas sinergias con colegas de profesión de otras partes de Estados Unidos, españoles, italianos, y de otros países latinoamericanos que se desplazaron allí. Un congreso en el que no solo las ponencias son importantes, sino que los momentos de networking cobran un papel fundamental para que el resto de asistentes te conozcan y pases a ser su agente en tu zona, para que les envíes los referidos, y para ello ponen en valor un sin fin de ideas de marketing, de las que hemos tomado buena nota. Un viaje en el que nos seguimos formando para mejorar los servicios a nuestros clientes. El cliente siempre en primer lugar.
Ha sido una semana llena de aprendizaje y no solo porque hemos recibido el curso de Jack Cotton de viviendas de lujo, “Luxury Real Estate Specialist”, lo que ha sido muy valioso para nuestros negocios, que nos ayudará a subir de nivel y poder aumentar el ticket medio, también por las distintas charlas que nos han transmitido cómo “Pasar de víctima a vencedor”, charla que nos dio un gran Ben Kjar, que nos dio una lección de vida, cómo hizo frente a la enfermedad con la que nació y que gracias al apoyo de sus padres y la fuerza que le transmitieron para seguir adelante, consiguió ser un gran Atleta, un gran Realtor® y lo más importante un gran padre de familia. La frase “Vive todos los días porque solo se muere una vez”, que creo que todos los asistentes al congreso se llevaron grabada. Con Jia Jiang hemos podido, de una manera divertida, “superar el miedo al rechazo”; ese rechazo se puede convertir en tu mejor regalo. Charlas de Marketing, storytelling, o como definir tu propio éxito, nos han servido para salir más reforzados. Aunque siempre me gusta decir que en estos congresos, de donde uno más puede aprender es de sus compañeros de viaje, un grupo, una piña que desde el primer momento conectó al 100%, y con los que siempre nos hemos sentido arropados tanto por ellos como por la organización.
Para continuar leyendo este artículo, accede a tu cuenta o regístrate:
Más del autor
