Vender una casa es posiblemente una de las decisiones más importantes que podemos tomar en la vida. Genera un impacto muy grande en la situación financiera, además de poner en juego factores emocionales que son difíciles de controlar.
Vender una vivienda en un mercado tan competitivo como el actual es una operación muy compleja. Más si cabe, si se aspira o se necesita realizar la mejor venta posible.