El 25 de mayo entró en vigor el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD) y las empresas del sector inmobiliario que prestan servicios on line (páginas web de compra-venta, alquiler, simulaciones de hipotecas, intermediación…) se ven afectadas por las nuevas disposiciones de esta norma.
Deben informar a clientes y usuarios, entre otros aspectos, de cómo y para qué se van a utilizar sus datos, de cada una de las finalidades que se persigan con su tratamiento, y contar con el consentimiento inequívoco/acción afirmativa, ya que no es válido el consentimiento tácito, las casillas previamente marcadas, o por omisión, para cada uno de los fines de tratamiento.