Experiencias compartidas de código ético

Montse Gomis Martínez - SIR
Personal Shopper Inmobiliaria. Especializada en el VallÈs
Property Buyers by Somrie. Barcelona

Soy SIR y estoy adherida al código ético desde hace casi un año. Trabajo como Personal Shopper Inmobiliario y tengo muy claro que mis clientes me contratan para que los represente, y en este sentido vamos muy alineados con el código ético que se propone desde SIRA.

Al representar y no intermediar con mis clientes tengo la oportunidad de defender sus intereses delante de la parte que representa a los intereses del vendedor, y como somos dos profesionales que conocemos el mercado y el sector es mucho más fácil entenderse y cerrar una operación. Cada uno cobra de su cliente y queda claro desde el inicio para quien nos contrata qué nos paga y quién nos paga, además de detallarles por contrato todos los servicios que les vamos a ofrecer.

También queda claro desde el inicio cual va a ser la relación entre los dos profesionales inmobiliarios y como se va a actuar vs. al cliente respectivo. En resumen, facilita mucho la correlación entre Realtors y entre cliente y profesional que contrata. Con SIRA me ha sido mucho más fácil relacionarme con profesionales del sector que entienden mi posición como defensora de los intereses de un comprador, y de cara a los compradores como su único interlocutor.

Profesionalizar el sector, representar y no intermediar y asumir los valores que te aporta el código ético, mejora nuestra imagen de cara al consumidor final y facilita nuestra contratación de servicios inmobiliarios.

Eva López - CRS/SIR
CEO de Fincas Eva - Barcelona
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eva@fincaseva.com

Cuento con una trayectoria de más de 34 años en el sector y he vivido muchísimas experiencias, hoy me gustaría compartir una de ellas, donde tuve que anteponer el código ético por encima de mis propios intereses.

Recientemente unos clientes se acercaron a nuestra inmobiliaria para conocernos y ofrecernos la gestión de venta de su piso, se trataba de una familia con dos hijos a la espera del tercero, donde vivían se les había quedado pequeño y estaban a la búsqueda de un nuevo hogar. En Fincas Eva desde el primer momento nos pusimos a su plena disposición, tras explicarles nuestro plan de marketing, las estrategias y cómo lograríamos llegar a conseguir la mayor difusión del inmueble, iniciamos el proceso de venta y en pocas semanas lo vendimos.

Una vez comprobado el éxito que tuvimos, confiaron en nosotros para la compra de su nueva vivienda, en este caso nos estaba costando encontrar una propiedad ideal que satisficiera todas sus necesidades.

Mientras seguíamos con su proceso de búsqueda, en la misma finca donde vivía un familiar vio un piso a la venta y se pusieron directamente en contacto con el propietario ofreciéndole un precio menor al que estaba anunciado en una agencia, el propietario les comentó que no podía venderlo particularmente puesto que tenía un acuerdo en exclusiva con la inmobiliaria, que estaba obligado a abonar los honorarios de igual manera, y no quería correr el riesgo de cerrar la venta a sus espaldas.

Nuestro cliente comprador, me llamo directamente para hacerme la siguiente propuesta: que firmara con el vecino de su familiar un encargo de venta anterior a la exclusiva de la otra agencia y que a su vez él me firmaría una hoja de visita alegando que lo había visto hace tiempo con Fincas Eva.

Por esta gestión me pagaría una cantidad, y de esta manera él podría gestionar directamente con el vendedor el precio final y se ahorraría abonar el importe total que tenía pactado con la otra agencia.

En nuestro sector la reputación y el respeto hacia los demás compañeros/as de profesión es lo más importante para poder generar confianza entre los potenciales clientes, y para mí fue una ofensa recibir esta propuesta. Siempre nos regimos por el código ético Realtor, esencial para evitar las malas praxis, y plasmar los valores y principios que nos guiarán en todo momento.

Si todos los agentes inmobiliarios trabajaran siguiendo las mismas pautas, a buen seguro que nuestra profesión estaría mejor valorada. Entre todos debemos cuidar las conductas para ganarnos el respeto y las buenas opiniones de la sociedad, de esta manera aportaremos valor a nuestro sector y podremos mirar al futuro con el máximo optimismo posible.

Nuria Castelvi - CRS/SIR
Gerente de Fincas Dueñas en Barcelona en la zona de Sants
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nuria@fincasduenas.com

Llevamos más de 40 años en el sector e intentamos estar siempre al tanto de todas las novedades y cambios que se van produciendo.

Creo fervientemente que el curso de Código Ético es indispensable para todos los profesionales que se dedican a este sector, ya que tratamos con temas muy sensible para todas las partes que intervienen en cualquier operación inmobiliaria.

Aunque en mi despacho, siempre hemos creído que por encima de nuestros intereses tiene que estar el de nuestros clientes, después de hacer el curso te das cuenta o refrescas datos y temas que te hacen ser aún más profesional. Te sirve para enfocar tu actividad a ser justo y ayudar a que tus clientes no tengan problemas, que la compra, venta o alquiler de su vivienda no sea un tema traumático, si no que estén tranquilos sabiendo que están en manos de profesionales que les cuidarán en todos los aspectos y velaran por sus intereses.

Fernando Romero Pintor – CRS/SIR
Gerente de Espai Bcn Flats en Barcelona
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frp66@icloud.com

Hace unas semanas, todos los miembros de Espai Bcn Flats hicimos el curso de Código Ético, con nuestro maestro Fernando Garcia Erviti, interesados por mejorar cada día y por entender que este negocio ha de tener una base y manera de actuar ética, transparente y procurando que nunca surjan malentendidos o adelantándonos a ellos.

Después de hacer este curso, hice la reflexión de que debería ser obligatorio para todas las personas que se dedican al mundo inmobiliario, al igual que en Catalunya se debe pasar un examen para poder obtener el AICAT y abrir tu oficina, creo que este curso debería estar dentro de las materias que se imparten, como legislación, derecho, marketing, etc.

Es muy importante tener la certeza de que el compañero, con el que estás llevando a cabo una operación y que probablemente no conozcas, se va a comportar de una manera ética y transparente, como tú mismo lo estás haciendo y que estáis trabajando con las mismas “Reglas del Juego”.

En este negocio, desgraciadamente, todos nos encontramos habitualmente con inmobiliarias que, a pesar de pertenecer a la misma MLS, te ponen trabas para visitar una vivienda, no te facilitan información necesaria, no pasan tus ofertas…

Esto último es lo que hace un tiempo me ocurrió con una agencia de Barcelona. Yo, actuando como agente del comprador, después de haber pasado por escrito vía mail la oferta de mi cliente y de haberla comentado telefónicamente con la gerente de dicha agencia, en lugar de una respuesta sólo obtuve excusas: que si era el cumpleaños de la propietaria, que si los vendedores se iban de fin de semana, por dos veces rehusó recibirme en su oficina, diciéndome su coordinadora que estaba muy atareada y no podía… Finalmente, a los 14 días suena mi teléfono, y la gerente de la agencia me informa que el piso ya está vendido directamente por un comercial de su agencia.

Sin duda le hace falta una buena dosis de Ética.

Para dedicarte a este negocio, uno de los puntos más importantes es trabajar con un Código Ético, demostrando transparencia y generando confianza día a día.